Iglesia originaria de mediados del siglo XII. Conserva de aquella época la portada con arquivoltas de arco de medio punto sobre columnas adosadas, en la parte superior de la entrada lleva unos salientes a modo de ménsulas que sostienen el tímpano sin decoración. La cornisa muestra canecillos con motivos geométricos, uno de ellos con la figura de un rostro humano. En el interior hay un arco triunfal de dos arquivoltas con capiteles de decoración vegetal.
En el año 1846 se realizó una modificación sustituyendo el ábside y agrandando la nave. También se añadió en la fachada una espadaña con base rectangular y arco de medio punto donde se sitúa la campana, en la cumbre presenta un pequeño frontón triangular flanqueado por volutas y con un óculo central, a los lados sendos pináculos.
Aún con estos añadidos, conserva totalmente el carácter del románico rural gallego.
